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Thor, el nuevo integrante de la Casa Rosada, y la oferta de Javier Milei a Dylan, el collie de Alberto Fernández

El Presidente volvió a ofrecerle al exmandatario la posibilidad de cuidar a Dylan, dada su actual situación judicial.

“¡Bienvenido, Thor! Fin”, escribió el vocero presidencial, Manuel Adorni, en su cuenta de X/Twitter, junto a dos fotos en las que aparece el nuevo perro de la familia de Javier Milei. En una de las imágenes el propio Adorni posa con el animal, mientras que en la otra también está la Secretaria General de la Presidencia, Karina Milei.

Thor, que aparentemente va a vivir en la Casa Rosada, es un perro de la raza de origen suizo Boyero de Berna, conocido también como Bernés de la Montaña. Se trata de un animal de gran porte, tricolor – marrón, negro y blanco – que puede llegar a pesar unos 50 kilos. Se lo describe como un animal inteligente, apto para ser adiestrado, en muchos casos requerido como perro de salvamento.

La “adopción” de Dylan

Se sabe del cariño especial que tienen los hermanos Milei por los perros, ya que el mandatario suele llamar a los cinco que tiene en Olivos, de la raza Mastín Inglés, “hijos de cuatro patas”.

En esa línea, con la llegada de Thor y en el marco de la imputación contra el exmandatario, Alberto Fernández, por los delitos de lesiones graves doblemente agravadas por el vínculo y por darse en un contexto de género y amenazas coactivas en perjuicio de su expareja, Fabiola Yañez, Milei le ofreció la posibilidad de cuidar de su collie Dylan.

“Alberto, del mismo modo como te he ofrecido cuando te fuiste a España cuidarte a Dylan, vuelvo a reiterarte que él será bienvenido para que lo cuidemos en la familia de las fuerzas del cielo”, señaló Milei a través de su cuenta de X/Twitter.

Si bien no hubo respuesta, el ofrecimiento parece naturalmente genuino, sin doble sentido o chicana, dado el apego que tiene el mandatario libertario con los perros y porque ya se había puesto a disposición en caso de que Dylan – y posiblemente su hijo Prócer – quisieran quedarse en la Quinta de Olivos luego del traspaso de mando.

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